En mis primeros años de carrera me desempeñé con DJ de discotecas. De ahí me convertí en promotor y luego en dueño de clubes y restaurantes. Durante toda esa época de emprendimiento en la vida nocturna aprendí muchísimas cosas que me han servido para conseguir el éxito en mis negocios y en la vida personal. En este post quiero compartir con ustedes algunos de mis aprendizajes más importantes durante mi viaje por la vida nocturna.
Cosas que aprendí:
- Siempre hay que sonreír. Nunca debes llevar los problemas personales o de trabajo al evento o club. Los invitados están ahí para divertirse y tu trabajo es asegurar que lo consigan. La gente piensa que tienes el trabajo ideal y así debe ser.
- Es una excelente manera de hacer networking. Todos los días me encuentro con gente que conocí en mis años de promotor o dueño de clubes. Es lamentable que no pueda recordarme de todos los nombres. Si alguna vez te encuentras conmigo y nos conocimos en uno de mis eventos te suplico que me saludes y me lo digas; tengo muy buenos recuerdos de esos tiempos. Siempre podemos seguir en contacto por Facebook o LinkedIn.
- Es una industria, no es una joda. La vida nocturna es una industria grandísima que crea muchos empleos y genera mucho dinero. Aunque pueda ser percibida como solo una industria de fiesta, es en realidad un excelente sitio para comenzar tu experiencia empresarial. Conozco a muchísimos empresarios exitosos en diferentes industrias que empezaron en la del entretenimiento.
- Se trabaja duro día y noche. La vida nocturna (clubes, restaurantes, barras, eventos) es muy divertida pero también muy dura. Se trabaja de día preparando todo y de noche para que tus invitados disfruten. Si no estas dispuesto a trabajar muchas horas, no te embarques.
- Es un trabajo muy divertido. Los mejores recuerdos de mi juventud están relacionados a las noches que hacía de DJ o producía eventos. La adrenalina que te da este trabajo es increíble y es inexplicable la satisfacción cuando a mitad de noche te trepas en la tarima y ves un mar de gente brincando y disfrutando. ¡Es un Trip!
- Las cabras no pueden velar las lechugas. Las personas que manejan el efectivo (cajeros, bartenders, meseros, promotores) no deben cuadrar el dinero solos al final de la noche. Procura que lo haga una persona independiente de tu departamento de contabilidad y finanzas.
- Cuida a tus promotores y empleados ya que son los que invitan a la gente y se encargan de que lo pasen bien. Ocúpate de ellos y trátalos bien ya que se convertirán en la esencia de la fiesta. Son tus embajadores.
- La música es un bisturí. ¿Quieres a un grupo de gente específico en tu evento o local? La música te permite hacer cortes muy precisos entre tipos de gente. Utilízala para segmentar el público.
- Lo más importante es la gente, no el local. He producido eventos en locales indeseables y otros en locales muy exóticos. Aunque siempre es recomendable un buen lugar, la clave del éxito del evento está en que venga la gente correcta
- Location, location, location. Si bien te acabo de decir que lo fundamental es la gente que lleves, también es muy importante tener un buen local en una localización visible, segura, con tráfico y estacionamiento. Los hoteles son ideales para este tipo de negocio.
- Los detalles hacen la diferencia. La diferencia entre un evento y otro está en los detalles. La iluminación, el sonido, la decoración y el ambiente son detalles que a simple vista no se notan pero trabajan en tu subconsciente. La música y el tipo de iluminación que utilizas al principio de la noche no debe ser la misma que a mitad o al final. Trabaja la experiencia para que vaya in crescendo durante la noche hasta lograr su punto climático. Ocúpate particularmente de la limpieza, el servicio y los visuales, entre otras cosas.
- Se hace dinero si se administra bien. Todo el mundo se piensa que los dueños de clubes hacen mucho dinero. Esto solo es posible si se administra bien. El hecho de que una botella de licor cueste $15 y en un club te cobren $15 por un trago no significa que todo el dinero se lo quede el dueño. Hay que pagar la renta, los empleados, el seguro, la luz, el agua, la seguridad y un montón de cosas más. Y a la vez hay que evitar el robo. Cuando un bartender regala un trago está robando. ¿Qué pasaría si tuvieras una tienda de ropa y la empleada le regalara camisas o zapatos a la gente?
- Una póliza de seguro puede salvar tu negocio. Asegúrate de tener un seguro para protegerte de las demandas por accidentes, peleas u otras situaciones. Incluye una cláusula de business interrruption o interrupción de negocio. De esta forma, la póliza te permitirá una compensación si tu negocio cierra por un fenómeno natural. Créeme que vale la pena, a mi me pasó.
- La seguridad es la prioridad #1. Ocúpate, sobre todas las cosas, de la seguridad de tu gente. No asumas que todo estará bien: siempre plantéate el peor escenario posible y desarrolla un plan para resolverlo en caso de que suceda. No asumas riegos innecesarios. Si estás pensando en hacer algo que ponga en riesgo a tus clientes, ¡no lo hagas!
- Cuando haya una situación de seguridad controlable no prendas las luces ni apagues la música ya que la gente está allí para pasárselo bien. No debes preocuparlos sin motivo ya que solo agravarás las circunstancias. Si la situación es controlable permite que tu equipo de seguridad la maneje y que continúe la fiesta.
- La prioridad #2 es proveer experiencias memorables. Como te comenté en mi post Cómo Enamorar a tus Clientes: “Under Promise and Over Deliver!”, provéeles a tus clientes experiencias que no puedan olvidar. Maneja sus expectativas y sorpréndelos siempre. Es la clave para conseguir su lealtad.
- Eres muy importante para las marcas de bebida, aprovéchate. Si tu club o eventos se ponen de moda las marcas de consumo querrán tener presencia allí para que se venda su producto. Aprovecha ese momento, genera algo de dinero adicional o pídeles que te ayuden a mejorar tu espacio. Verás como estarán dispuestos a pagar.
- Vendes fantasías, pero no te las creas. Los clubes son sitios para pasárselo bien. Están hechos para lograr eso y lo que vives allí no siempre es la realidad. Procura siempre tener eso claro y que las fantasías no te lleven por delante. Siempre he dicho que el dueño del un club es como un surfer, debes estar siempre encima de la ola, no debajo.
- Evita los excesos. Tomarse un trago o dos no está de más, pero tienes la responsabilidad de cuidar de tí mismo y de los demás. Recuerdo que mi cliente Pete Coors siempre andaba con una Coors Light en la mano en todos los eventos. ¿Qué hacia para no embriagarse? La llenaba de agua. Pero si ya es tarde y te has pasado con las tragos, lo mejor es imitar a Harry Houdini y hacer un acto de escapismo sin despedirte de la gente. ¡Gracias a esta estrategia me mantuve fuera de líos!
En conclusión, los emprendimientos en la vida nocturna son buenísimos. Se pasa fenomenal, se hace buen dinero, se conoce mucha gente, entretienes, haces cosas maravillosas y hasta puedes conocer a tu media mitad. Sin embargo como en todo, hay riesgos que debes tomar en consideración, controlar o evitar. Cuídate mucho.
Acertadísimo! Muy en especial «la satisfacción cuando a mitad de noche te trepas en la tarima y ves un mar de gente brincando y disfrutando.» Ahi se apagaba el chip de la preocupación por el «si se llenará o nó». Keep it up Carlos!
Gracias Luis por comentar. Ese feeling está brutal. A veces lo extraño….Un abrazo, C
Excelente!! Te felicito y mucho exito!
Gracias Jose Carlos. Tu fuiste parte de eso. Abrazo, C
Genial…! Muchos buenos momentos que creaste con y para tu gente. Que buenos tiempos aquellos. Un abrazo.
Buen escrito Carlos y es bien aplicable a otros foros.
Gracias Christopher. Tu has sufrido algunas de las consecuencias de hacer eventos! ;)